¿Cómo una persona logra la felicidad?

La felicidad humana se logra al someterse a Al-láh, obedecerle y estar satisfecho con Su decreto y destino.

Muchos afirman que todo es intrínsecamente sin sentido y, por lo tanto, somos libres de encontrar significado para nosotros mismos a fin de tener una vida plena. Negar el propósito de nuestra existencia es, de hecho, autoengañarse. Es como decirnos a nosotros mismos: “Vamos a suponer o fingir que tenemos un propósito en la vida”. Como si nuestra situación fuera como el caso de los niños que juegan a ser médicos y enfermeras o a ser madres y padres. Solo alcanzaremos la felicidad si conocemos nuestro propósito en la vida.

Si una persona en contra de su voluntad es puesta en un tren de lujo, en primera clase; encontrará una experiencia lujosa y confortable, el pináculo de la opulencia. ¿Sería feliz en este viaje sin obtener respuestas a preguntas como: ¿Cómo subí al tren? ¿Cuál es el propósito de este viaje? ¿Adónde me dirijo? Si estas preguntas quedan sin respuesta, ¿Cómo puede ser feliz? Incluso si comienza a disfrutar de todos los lujos a su disposición, nunca alcanzará la felicidad verdadera y significativa. ¿Es suficiente una deliciosa comida en este viaje para hacerle olvidar estas preguntas? Este tipo de felicidad será temporal y fingida, y solo se puede lograr ignorando deliberadamente para encontrar respuestas a estas importantes preguntas; es como el caso de falsos subidones provocados por la embriaguez que lleva a la muerte de su dueño. Por lo tanto, la verdadera felicidad de una persona no se logrará a menos de que encuentre respuestas a estas preguntas existenciales.

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